Los bolsos de piel son un complemento primordial por excelencia, por eso es conveniente llevarlo siempre con una imagen cuidada. La calidad y durabilidad de los productos de piel son un determinante para realizar una compra u otra.
TU O YO dispone de bolsos hechos con materiales de calidad como pieles europeas únicamente provenientes de la industria alimentaria y pieles de curtición vegetal no perjudicial para la salud y medio ambiente.
Consejos para alargar su vida y conservar su belleza, color y flexibilidad, recomendamos los siguientes:
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Manejarlos con cierto cuidado y con las manos limpias. Al tratarse de un material natural, son muy susceptibles a la absorción de grasas y aceites. También hay que tener una especial atención a no dañarlos con las uñas, sobre todo en el momento de abrir o cerrar el bolso.
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Hay que guardarlos en una bolsa de tela cuando no se vayan a usar y así protegerlos. Si no se usa durante unos días o temporada, es conveniente rellenar con papeles para evitar que pierdan su forma original, sobre todo en los casos de bolsos grandes.
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Aunque no estén sucios es conveniente que se hidraten un par de veces al año. Se pueden limpiar con un paño de algodón blanco y un acondicionador de piel como por ejemplo la crema Nivea. De esta manera se mantienen suaves y flexibles. Después hay que pasar un paño limpio para evitar que los poros queden obstruidos.
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Debido a su porosidad, a este tipo de piel le afecta mucho el agua dejándole manchas o marcas en forma de gotas, por lo que se debe tener especial cuidado con la lluvia. No deben mojarse, pero en caso de que ocurriese lo primero es secarlo lo antes posible con un trapo o pañuelo de algodón, sin frotar y sin usar ninguna fuente de calor, dejando después que se termine de secar al aire. Para recuperar la flexibilidad original, lo mejor es aplicarle una crema acondicionadora, pero no quitará las marcas en su totalidad.
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En caso de manchas de aceite, sangre o alimentos, hay que limpiarlas en cuanto se pueda, lo antes posible mejor. La mayoría de las veces se puede arreglar usando un material absorbente como los polvos de talco. Para ello se cubre la mancha con el polvo y se deja unas horas. Después se retira el polvo con un cepillo muy suave y con un paño limpio.
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Es recomendable en bolsos grandes no llevar productos que se puedan derramar o manchar el bolso, como por ejemplo los cosméticos y/o bolígrafos. Por eso es recomendable introducirlos dentro de un pequeño neceser pues con ello se evitará más de un susto.
Un buen bolso de piel siempre es una inversión segura tanto por su belleza como por su tacto. Debe estar disponible en el armario durante muchas temporadas, y es por ello que se aconseja notablemente cuidar la inversión que se ha hecho a través de buenos hábitos y cuidados.
Esperamos que os hayan sido útiles estos consejos y recomendaciones!
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Que tengáis un buen lunes 😉